lunes, 7 de mayo de 2007

ALMAS GEMELAS

El 23 de agosto de 1999, recibí una llamada a mi móvil de un número extraño con prefijo de Madrid.
Al descolgar, la voz que me hablaba no me era familiar pero cuando se presentó, aún al no conocerle en persona, ya sabía de quién se trataba. Éste, Pedro Pablo, director de la Fundación ONCE del Perro Guía en Madrid me proponía irme a EEUU, más concreto a Rochester donde se hubicaba la escuela de perros guía.
Me tenía que decidir pronto ya que el curso partía el 23 de octubre de ese mismo año, y como era algo que tanto esperaba y tanto deseaba, le dige el Sí al instante.

El mes de septiembre fue muy emocionante e ilusionador porque no paraba de llegarme a casa cartas explicativas de la zona a donde iva, el clima que hacía allá, la ropa que debería de llevar, etc. Y también recibí pegatinas para las maletas para cuando estuviéramos en el aeropuerto para poderlas distinguir con facilidad de entre todas.
Cuanto más se acercaba ese día, más nervios tenía.

El 23 de octubre, me acompañaron mis padres al aeropuerto de Barajas en la que deberían de estar mis compañeros de curso y Bárbara la intérprete.
Efectivamente, al llegar allí me los encontré a todos. Jose de Tarragona, Yolanda de Barcelona, Luis y Alberto de Madrid, Ramón de Tenerife y Bárbara.
Al presentarnos todos, nos fuimos a la terminal y me despedí de mis padres.

A las 12:00H partía el avión hacia Nueva York, donde comienza mi aventura y el principio de una vida más feliz junto a un ser que supo darme todo lo mejor de sí.

PRÓXIMO CAPÍTULO: EMPEZANDO A CONOCERNOS

1 comentario:

Callejuelo dijo...

Bienvenido de nuevo. Todos nos acordamos mucho de River sobre todo cuando te vemos sin él, porque en cierta medida formaba parte de ti mismo